Sumérgete en la verdad revelada
Las personas a través de los siglos han creído en los espíritus de una clase u otra. No necesitamos aceptar las ideas de los hombres sobre este asunto; más bien, debemos creer lo que Dios nos ha revelado, pues Dios mismo es Espíritu (Juan 4:24) y es el Creador de los ángeles (Salmo 148:2-5).

